sábado, 26 de marzo de 2011

El Viaje al Interior !

La soga estaba amarrada fuertemente y sujetada por un trípode.  Me acerqué al borde y miré a través del pequeño agujero.  No era tan pequeño en realidad porque cabían dos personas a la vez, pero si uno de ellos era gordito, pues iban a tener roce de mas... ¿Me entiendes verdad ?

Yo soy aventurero por naturaleza y Mari también, así que no era miedo, pero siempre había un poco de hormigueo al "boquete" entrar.  Fuimos los primeros en descender y aunque bien amarrados equilibrio bueno había que tener para evitar dar vueltas en la soga como el collar fino y largo que te quitas y quieres desenrollar.

Oscuridad y un silencio sepulcral, baja con calma... escucha... oigo un movimiento circular.  ¿Qué, un movimiento circular ?  Si, es como destapar una bañera llena y escuchas el ruido del agua cuando empieza a circular.  El movimiento es suave, se crea un pequeño remolino, pero como todavía hay mucha agua, no es duro el ruido, es suave, es el sonido del movimiento circular... suave, movido, hay que estar conciente y con la mente en blanco para disfrutar.

El cuerpo en el aire descendiendo se empieza a relajar.  ¿Cómo es posible que baje por una soga al silencio, a la oscuridad y me comience a relajar ?  Mi cuerpo estaba cansado ya de tanta actividad.

Méjico en enero y un viaje eco'turistico escogí para celebrar mi aniversario de boda que fue en noviembre. Yo se, un poco fuera de tiempo, no me lo tienes que recordar, Mari se ocupa de eso, tu sólo lee y disfruta de este suceso.

Kilómetros de distancia de cualquier ciudad entramos a una aldea en una van.  Ya pasado el mediodía y llegando de en bicicleta visitar las pirámides del Yucatán, fue mucha la alegría almorzar comida indígena preparada en calderos sobre leña, servida en platos de barro hechos en Méjico, no fabricados en China como casi todo lo demás.  ¡Qué buena está !  Era un lugar remoto y emprendimos camino, por lo menos 45 minutos de caminar.  Llegamos a lo que parece un lago y desde lo alto le digo al indio "Que gracioso el cocodrilo de hule que pusieron para impresionar !"

"No amigo, el no se mueve para que no lo "veas" pero si al agua caes te comerá, ese es Tango, y es un cocodrilo de verdad.  Hay otro, Parco, pero ese nunca sabemos por donde está !" Ja, ja...

Ahora si que es más emocionante cruzar el lago de un lado a otro por un cable de acero, con los pies guindando y a toda velocidad.  Ya entiendo para que el casco, si al agua caigo, tengo con que darle al cocodrilo para entretenerlo en lo que corro sobre el agua, a lo Jesús en el mar...

Camina, camina, por la selva camina.  Hay pájaros y monos, árboles con coraza de pica pica, serpientes bonitas, piedras de lava y ceibas por montones.  Camina, camina.  Mantuve el paso y estaban sorprendidos los chamacos jovencitos que habían llegado de los Estados Unidos.  Yo el mas "viejo", Mari 6 años detrás (mas joven, por favor, evítenme problemas...) y el próximo en edad le llevaba mas de 15 años de joven, por eso las "nenas" recién graduadas de universidad le decían a Mari:

"Mari, when I am your age, I want to be just like you, you are a Rock Star !!"  ¡Ja, ja, ella lo niega pero es verdad !

Una ceremonia tuvimos con un shamán (espero que así se escriba) quemó especies en el fuego, mucho humo blanco, muchas fragancias, bendijo la tierra, el cielo y el agua en su idioma natal; que no entendimos, pero en un sentido había entendimiento, ya que había agradecimiento de vida en las palabras extrañas de bondad.  Un viento fuerte sopló, que retumbó los miles de árboles que nos rodeaban en la selva.  ¿Sería casualidad que ocurrió cuando el indio su oración terminó ?

Ahora llegó el momento, bajamos a un cenote.  Imagínate un coco enterrado en la tierra.  Escarbas y encuentras la parte de arriba.  Le cortas una tapita, pequeña, pequeña apertura y miras por dentro y no ves nada.  Los ojos se ajustan y por fin puedes ver, y te das cuenta que el coco tiene agua por dentro.  Mitad tiene aire, mitad tiene agua, no sabes cuanta pero sabes que es mucha.

Cuerpo relajado, bendecido por el shamán, al agua llegamos en la oscuridad.  Una goma gigante de aire espera por Ti.  Ahí te sientas y te mojas sólo las nalgas y las manos y la punta de los pies.  Miras para arriba y ves no el sol, pero sus rayos a la caverna subterránea entrar.  Respiras bien, es más, respiras mejor.  El agua está fresca no está caliente, ni muy fría.  Si eres valiente e intrépido como lo fui yo, sueltas el tubo de aire y nadas, nadas en el agua refrescante sin nada que sujetar, sólo flotar.  Te sumerjes donde no se ve la luz, pero te quedas tranquilo porque sabes que siempre esta ahí.  Vida nueva, una aventura, la calma se apodera de ti.  No quieres salir de este mundo nuevo envigorizante, venciste el miedo, llegaste a la calma, al tiempo olvidaste el cansancio del día.

En algún momento subes, ves la vida diferente, el cielo esta lindo, la gente sonríe, que bueno estar vivo, encontraste la Paz, la Verdadera Felicidad !!

Yo regreso a diario aunque estoy en Puerto Rico, porque no es muy diferente esta sensación, de cuando puedes dar gracias a Tu Creador, al entrar en meditación.  Todos tenemos un Cenote Interior, anda se aventurero, cierra los ojos en un lugar tranquilo, respira profundo y desciende... que Tu shamán interior ya te dió la bendición...

Miguelo

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